marzo 1, 2021

Las Emociones son Fuego, son Agua

¿Qué Son las emociones?

Hablar de las emociones es hablar de fuego, de agua.

Y es que las emociones son fuego, son agua.

Son quietud. Son Estallido, según el estado emocional en el que cada quien se encuentre.

Es una fuerza viva. Es un impulso potente.

Son destellos.

Las emociones son como las olas del mar, que suben y que bajan.

O, como el fuego ardiendo, que se consume o se aviva.

Propias o ajenas, las emociones, te envuelven, te abrazan o te inundan completamente apabullándote si no sabes cómo conducirte en su presencia…

Las emociones son características de los seres humanos. Sentirlas es toda una experiencia.

Lo que importa es que sepamos darnos cuenta de que si eso que nos inunda o abraza es propio o ajeno.

Las emociones son química, vienen de un motor energético que portamos todos.

Sin embargo, no es igual en cada uno de nosotros.

Hay seres que tienen una química emocional en constante ebullición haciendo que sus códigos emocionales se manifiesten constante y consistentemente. Son los que tienen el centro emocional activo.

Otro grupo, aproximadamente el 50 por ciento de la humanidad, cuya química emocional es pasiva, es decir, no se da de manera consistente. Son los que tienen el centro emocional inactivo.

Centro emocional activo

El 50 por ciento de las personas tienen un motor emocional activo.

Centro emocional activo

En una persona con un centro emocional activo en una ola alta sus emociones podrán sentirse como una candente hoguera, como un volcán activo, o, como un mar embravecido; en una ola baja, lo contrario.

Dependiendo de los procesos o códigos emocionales que traiga en su ADN.

Esta hoguera, literalmente puede “quemar” al que lo porta

así como -y principalmente- a los que le rodean (por electromagnetismo),

siendo estos últimos los más afectados, si no se hace un trabajo interior de ambas partes.

A su vez, la ola embravecida puede arrasar con todo lo que se le atraviesa en el camino.

De allí la importancia de conocerse.

Vivir en una “ola emocional” continua y consistente, no es ni bueno ni malo.

Es humano.

Estas personas experimentan el mundo desde sus emociones.

Centro emocional no activo

Por otro lado, hay personas que no tienen un motor emocional activo, lo cual no significa que no sientan emociones, como es mi caso, por ejemplo.

Simplemente quiere decir que su laboratorio emocional no es constante ni consistente.

Estas personas no experimentan el mundo desde sus emociones. Eso es todo.

También es humano.

Centro emocional no activo

Sin embargo, estas personas tienden a absorber y a llenarse de emociones ajenas cuando no son conscientes de sus propios procesos emocionales.

Como me ha sucedido muchísimas veces, llevándome a actuar de una manera no natural en mí.

Aquí es importante tener en cuenta que el entorno influye en quienes tienen el centro emocional no activo o en quienes tienen códigos emocionales no activos.

Códigos emocionales

¿Qué códigos emocionales portamos los seres humanos?

Tenemos todo un bagaje emocional categorizado en cuatro corrientes diferentes.

Cada corriente emocional tiene sus propias características y se presenta en diferentes formas o estadíos en cada ser humano y maneja sus propios códigos emocionales. (Compartiré sobre ello en otras publicaciones).

  1. intimidad, sexualidad, fricción
  2. Sensibilidad, lealtad, sociabilidad, amistad, reciprocidad, euforia, tradicionalismo; rechazo, arrebatos, principios de igualdad, solidaridad, alianzas, rupturas, revolución, violencia, ira, gritos
  3. Emociones, romanticismo, dulzura, embelesamiento, templanza, alegría, tristeza, melancolía, depresión, susceptibilidad, estancamiento; abundancia, inestabilidad, estados de ánimo cambiantes, vacío emocional, pasión
  4. Sentimientos, experiencias, expectativa, ilusión, deseo, dolor, sufrimiento, inadecuación, nerviosismo
Códigos emocionales
Códigos emocionales

Los códigos emocionales, en general, están improntados con la corriente emocional que va de la esperanza al dolor (por intervención mental).

Es necesario reconocerlos, aceptarlos, abrazarlos, respetarlos y amarlos. Son parte de nosotros.

No se trata de evadirlos u ocultarlos. Es imposible y además desgastante.

Es más útil observarlos y surfearlos. El trabajo interior es imprescindible en cada caso.

Ahora que ya sabes como estamos estructurados los seres humanos emocionalmente hablando…

¿Tienes un centro emocional activo o inactivo?

¿Sabes qué códigos emocionales (procesos) innatos, naturales, tienes?

¿Quieres conocerte a ti mismo/a?

¿Estás listo/a para empezar un viaje a tu mundo interior?

Contáctame.

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